Un Audi Q5 2.0 TFSI quattro, fabricado en la planta de San José Chiapa, México, fue el vehículo con el cual la marca alemana alcanzó la marca de 8 millones de unidades equipada con su ya histórico sistema de tracción inteligente.
La tecnología quattro, que entrega una gran, poderosa y segura experiencia de conducción, aún en hielo o nieve, debutó en 1980 y a la fecha está presente en más de cien versiones de Audi. De hecho, esta tracción inteligente está presente de serie en los modelos Q7, A4 allroad quattro, A6 allroad quattro, A8, R8 y toda la gama de modelos de las líneas S y RS, entre muchos otros. En 2015, 44% de todos los clientes de Audi a nivel mundial eligieron un modelo equipado con tracción quattro. El Audi Q5 lidera esta lista con 262 mil unidades comercializadas en todo el mundo. Vale destacar que sólo en Alemania, las ventas de modelos quattro alcanzaron un total de 122.048 vehículos durante el año pasado.
La tecnología quattro se caracteriza por un tren motriz robusto, instantáneo y confiable, que distribuye permanentemente y de forma óptima la potencia del motor a las cuatro ruedas, lo que permite que el auto mantenga su estabilidad y potencia independiente de los tipos de superficies o condiciones climáticas, derivando a un mayor agarre y mayor seguridad. Esto, gracias a que el diferencial central del tren motriz distribuye la fuerza del torque a los ejes delanteros y traseros, dependiendo de las exigencias del camino.
Audi ofrece la tracción quattro en diversos modelos y se personaliza de acuerdo a cada uno, dependiendo de las características de performance, motorización, potencia, entre otros.