A pocos días de las fiestas patrias, muchos chilenos se preparan para emprender largos viajes en auto. La electromovilidad se presenta como una alternativa cada vez más atractiva, no sólo por su menor impacto ambiental, sino también por el considerable ahorro que representa.
Un ejemplo concreto, es comparar el costo de un viaje clásico en estas fechas entre Santiago y La Serena (480 kilómetros, aproximadamente), entre un vehículo eléctrico y uno a combustión.
En un viaje ida y vuelta, en auto eléctrico, con el modelo BYD Yuan Plus (480 kilómetros de autonomía y un rendimiento de 5,8 km/kw), el gasto es de aproximadamente $40.000; mientras que un vehículo a combustión (que rinda 11,5 kilómetros por litro) requeriría un gasto en bencina cercano a los $108.500. En otras palabras, pese a la baja que la bencina experimentó, viajar a la IV Región en un auto eléctrico es tres veces más barato que en un auto tradicional ($68.500 de ahorro).
El cálculo se realizó con un precio de $1.299 por litro de bencina y de $235 de electricidad, considerando una carga del 100% domiciliaria y otra en una electrolinera -Socos, Pichidangui o Los Vilos- en el camino al norte.
El gerente general de BYD Auto Chile, Cristián Garcés, añadió que “además del ahorro económico, la electromovilidad contribuye a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, lo que es fundamental para enfrentar el cambio climático. Al optar por un vehículo eléctrico, los consumidores están haciendo una elección consciente por un futuro más sostenible”. Asimismo, es importante destacar que el ahorro en un vehículo eléctrico no se limita al costo de la energía. Otros factores, como el menor mantenimiento requerido e incentivos para la compra de estos vehículos, contribuyen a reducir aún más los costos a largo plazo.
